Hay momentos en la vida que necesitas vomitar todos tus
demonios internos, y explayarlos de alguna u otra manera, pero decirlo. Desde
Mayo hasta Noviembre pasaron seis meses, pero para mi fueron eternidades,
siglos infinitos que no tenían fin (¿tenemos un fin definitivo?). Podría decir
mil cosas que pasaron estos seis meses pero lo voy a resumir en una: Catarsis.
De esto se trata esta nota, del CATARSIS.
Supe ser gigante. Supe ser ángel. Supe ser novia. Supe ser
amiga. Supe ser hija. Supe ser hija de puta. Supe ser sincera. Supe ser
honesta. Supe ser yo.
Colgar los timbos, y encontrar a la persona “adecuada” en la
cual compartí poco tiempo de mi vida (y decir que es poco, lo digo… literal).
Deje todo, lo poco que tenía lo tire a la mierda por esa persona y sin embargo
fue ahogarse en un pequeño vaso de agua. Me di cuenta que supero a las personas
fácil pero no supero los momentos, no supero las cosas que me hicieron mierda.
No supero lo basura que puede ser una persona, y la maldad (oscura y verdadera
que puede tener). Sin embargo, nada fue peor que luchar conmigo misma. Mil
demonios internos, y anda a saber cuantos más tengo. Encontrar mi equilibro
fue, y es lo mas difícil que me está pasando en el año… me encuentro y me
desencuentro ¿y el equilibro donde está? Cuando no me encuentro, me desprendo
de mi cuerpo y me veo desde afuera, mi alma mira mi cuerpo, me mira como soy y
me ve que estoy luchando con mil personalidades, sentimientos que se apoderan
de mi y no me dejan vivir. Me vuelan el cráneo. No son ustedes, soy yo. No los
trato mal porque me hicieron algo, si no porque… no me encuentro.
Hoy en día no se si me encontré, pero si puedo decir que descolgué
mis alas, les saque el polvo y me las colgué devuelta. Me pongo los guantes en
cualquier situación, porque así soy guerrera ante todo, el pecho a las balas y
de frente a las cosas. ¿Qué más puedo pedir? Despues de tantos días oscuros
sonrío como si no hubiera mañana, porque tengo todo lo que necesito. Tengo mi
bienestar, y encontré el refugio de mi paz (devuelta). Que vengan de a cien,
que los espero con escudo y espada. Porque nací para eso, para ser guerrera.
Porque la vida, siempre necesita un poco de guerra.
0 éxtasis, lsd y cocaína.:
Publicar un comentario